HISTORIA INSTITUCIONAL
La Creación:
Hacia fines del siglo XIX, según consta en un informe del año 1895 al Consejo General de Escuelas del profesor Dn Enrique Abásolo Sub inspector de Escuelas en ese año, la ciudad de Victoria contaba con quince escuelas once urbanas y cuatro rurales, tres de las urbanas y cuatro de las rurales eran fiscales, siete particulares y una municipal. Contenían un total de 1073 alumnos. Los maestros no eran todos diplomados las escuelas fiscales contaban con dieciséis docentes nueve poseían título, en las escuelas particulares había veintitrés maestros sólo dos eran diplomados.[1]
El siglo XX se inicia con las necesidades elementales de educación medianamente cubiertas, con respecto a la educación media encontramos que el año 1893 Dn Abraham Bartoloni había creado el Instituto Argentino incorporado al Colegio Nacional de Paraná, la Comunidad Benedictina en 1901 fundaba el Colegio Agrícola industrial y en 1909 funcionaba el Colegio Italo – Argentino de Enseñanza Primaria, Comercial y Bellas Artes de Pascual Avalone,
Las mencionadas instituciones no alcanzaban para satisfacer las aspiraciones de aquellos que deseaban continuar sus estudios de bachillerato, debían trasladarse a Concepción del Uruguay, Paraná o Santa Fe y tampoco cubrían la necesidad de formación de maestros, quienes ejercían como maestros se preparaban con el Profesor Enrique Abásolo egresado de la Escuela Normal de Paraná.
Atendiendo a esta situación los vecinos influyentes de aquel entonces comenzarán a realizar las gestiones correspondientes para la creación de establecimientos de enseñanza media.
Era claro para aquellos ciudadanos el rol fundamental de la educación para nuestra ciudad que, por aquel entonces, tenía un puerto de relevancia y las ganancias de las actividades portuarias hacían pensar en un futuro floreciente en el marco de un país que se proyectaba al mundo.
Según cuenta uno de los profesores fundadores Dr. Ricardo Ferro Colton, en una nota fechada en 1960, las gestiones para la creación comenzaron en 1909, a título particular aprovechando su estadía en Buenos Aires en casa de su primo Roberto Repetto quien era subsecretario del Ministerio de Instrucción Pública comentó la inquietud de crear un Colegio Nacional en Victoria atendiendo a «…que había muchos aspirantes a obtener el bachillerato pero para quienes no era fácil conseguirlo por el traslado a establecerse en Uruguay o en Paraná.» [2]
La idea del colegio nacional no prosperó, pero la inquietud no fue totalmente rechazada el Ministerio ofreció crear una escuela normal por estimarlo más conveniente, «En cambio ambos vieron la conveniencia de instalar una escuela normal rural como habían hecho en otros puntos porque les preocupaba que el número de maestros diplomados era insuficiente para atender el desarrollo de la cultura, a tal punto que en muchísimas partes se llenaban los cargos con gente que carecía de título…»[3]
Ferro Colton se comunicará con el Dr Bartoloni (miembro integrante de la Comisión pro Intereses Departamentales) que se encontraba en Buenos Aires junto al inspector del Consejo General de Educación Dn Mateo Jofré ambos solicitarán colaboración al Profesor Normal Manuel Robledo Loza periodista del diario La Razón y traerán la noticia a la Comisión Pro intereses Departamentales, entre todos y con la colaboración del entonces intendente Olayo Vieyra posibilitarán que en el año del Centenario de la Argentina y de nuestra ciudad, el 17 de enero de 1910 el presidente José Figueroa Alcorta y el Ministro de Instrucción Pública José Carlos Naón firmaran el Decreto de creación de la Escuela Normal Rural de Victoria. Pero los esfuerzos de los vecinos no terminarían aquí, según consta en una investigación realizada por dos profesoras de la institución, Dios Sonia y González María Cristina para poner en funcionamiento la escuela el Ministerio sólo envió el Decreto: «…un lacónico pero significativo decreto presidencial encerraba estos términos: Fúndase la Escuela Normal Rural Mixta de Victoria – Provincia de Entre Ríos.
Tan rotunda expresión dejaba a quienes tanto habían bregado por su logro en una rara especie de soledad en cuanto a los recursos materiales y humanos indispensables para la organización» [4]
Podemos apreciar en esta cita que aquellos victorienses, integrantes de la oligarquía local, tenían que seguir empeñándose para solucionar el problema del edificio, del equipamiento y el personal docente para que fuera posible el funcionamiento de la institución. Indudablemente en aquellos tiempos la vida se entendía de otra manera, leyendo los documentos se percibe una apuesta total hacia el futuro una convicción clara de ser ellos generación fundante, por ello quizá es que no desistieron, diríamos que se obstinaron aún más en conseguir lo que se necesitaba y así el 10 de abril de 1910 se dictan las primeras clases de la Escuela Normal Rural de Victoria, en unos galpones y en unas condiciones que distaban mucho de ser las óptimas, tardará veintidós años en tener un edificio propio y digno
El Edificio:
Los incansables vecinos se organizaron para dotar a la escuela de un edificio propio y adecuado para la elevada misión de formar maestros. Se conformó una «Comisión pro Escuela Normal», presidida durante muchos años, por la Sra. Isabel Espíndola de Salarí. Este equipo de trabajo es el que arbitró todos los medios a su alcance para recolectar fondos y así adquirir los terrenos necesarios y proceder a la consecución de la anhelada obra. Luego de numerosos trámites, esfuerzos y muchísimo trabajo, la construcción comienzó en 1928 y avanzó rápidamente…en sólo tres años logran erigir un imponente edificio en el marco de una crisis económica mundial. En diciembre de 1931 se realizó la última fiesta de colación en el primitivo local.
En 1932 comienzó a funcionar la escuela en su nueva casa, sobre avenida Centenario…construida con los materiales más nobles de la época, en un estilo acorde a las tendencias en boga en la década del ´20, destacándose sus techos inclinados de tejas…la fachada sobria en la que resaltan las hileras de ventanas y el detalle ornamental que corona la puerta de ingreso: el Escudo Nacional Argentino y los cuernos de la abundancia, símbolo que representa la identificación entre educación y progreso; la herrería artística que engalana la puerta principal y las barandas de las escaleras de mármol interiores hacen honor a la tradición victoriense que supo combinar la habilidad técnica con la belleza. Luego se construyeron la vereda, la verja, el salón de actos y la casa del director.
Este edificio es un símbolo de una época y mentalidad en el que el Estado asumía totalmente el manejo y el financiamiento de la educación…su majestuosidad nos remite a la elevada función que lo genera: la de formar los maestros de la nación argentina. Miles de victorienses han estudiado y estudian en sus aulas. Desde la década del ´70 contiene a otra institución señera de la localidad: la Escuela de Comercio…por lo que también la escuela constituye un patrimonio de altísimo valor de uso…sus dependencias se utilizan y tienen plena vigencia…social, educativa, cultural…su existencia beneficia a miles de personas.
La Escuela Normal Superior «Osvaldo Magnasco» de la ciudad de Victoria forma parte del patrimonio histórico-arquitectónico porque es un componente del ambiente con significación simbólica, estética, histórica, científica y social; al observar y recorrer sus dependencias comprendemos mejor nuestro pasado y nos remitimos a un devenir común; su histórica función educativa enriquece nuestra calidad de vida, es un referente de la afirmación de la identidad y del tejido social que le dio origen.
El edificio es un verdadero tesoro, su valor ha sido reconocido oficialmente por el Decreto Provincial N° 6.676/03 que lo declara de interés histórico-cultural; su preservación debería ser un objetivo principal de la planificación, objeto de políticas permanente, involucra la responsabilidad del Estado y de las autoridades políticas y apela a la participación de los integrantes de la comunidad educativa: equipo directivo, cuerpo docente, personal administrativo y de maestranza, alumnos, padres, asociación cooperadora y de ex alumnos, etc.
EL NIVEL SUPERIOR
La formación docente pasa a formar parte del nivel superior en 1971 con la creación del Profesorado de Enseñanza Primaria, en 1975 se abre el Profesorado para la Educación Preescolar
A principios de la década del 90 se operan significativos cambios a nivel pedagógico y organizativo en nuestra institución, vinculados con los siguientes factores:
* Habilitación del Profesorado de Castellano, Literatura e Historia (1992)
* aplicación de un nuevo plan de estudios para el Profesorado para la Enseñanza Primaria (1993)
* Suspensión transitoria de la matrícula en el Profesorado de Educación Preescolar (1997) por saturación de la plaza en la mayoría de los departamentos de la provincia
En marco de la transformación educativa impulsada por la Ley Federal de Educación se implementaron los siguientes planes:
* Profesorado para la EGB 1º y 2º ciclos. (1999)
* Reconversión del Profesorado de Castellano, Literatura e Historia en
– Profesorado de Tercer Ciclo de la EGB y de la Educación Polimodal en Lengua y Literatura (1999)
– Profesorado de Tercer Ciclo de la EGB y de la Educación Polimodal en Historia (año 2002)
* Reapertura del profesorado de Educación Inicial (2005)
* Puesta en funcionamiento de los Departamentos de Capacitación y Perfeccionamiento y de Investigación Educativa.
Actualmente, la situación del Nivel Superior se define en los siguientes términos:
* Se inicia el proceso de cierre del profesorado para la EGB 1º y 2º ciclos. (1999) y del profesorado de Educación Inicial (2005) que se modifican según el nuevo Diseño Curricular Provincial aprobado por Res. Nº 5420/08:
– Profesorado de Educación Inicial
– Profesorado de Educación Primaria.
* Se mantienen sin cambios por el presente ciclo lectivo (2009):
– Profesorado de Tercer Ciclo de la EGB y de la Educación Polimodal en Lengua. (1999)
– Profesorado de Tercer Ciclo de la EGB y de la Educación Polimodal en Historia (año 2002)
[1] MURATURE DE BADARACO Ma del Carmen
[2] FERRO COLTON; R. ; Recuerdos de la Creación de la Escuela Normal Rural de Victoria en la publicación del cincuentenario de la Escuela Normal julio 1960.
[3] Op.cit 2
[4] Dios S. y González C.; El edificio de la Escuela Normal de Victoria – Anhelo obra y testimonio de una comunidad (1910 – 1931) trabajo de investigación realizado en 1985 con motivo del 75 aniversario de la Escuela Normal.
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